CLEVER BOY

Este precioso gatazo es el de Gádor. Gádor es mi proyecto de ATV (osease asistente técnico veterinario, algo así como "enfermeraveterinariavalgolomismoparaunrotoqueundescosío". Clever apareció en nuestra consulta un día porque llevaba mucho tiempo en un patio de vecinos, le daban de comer, étc etc y les daba mucha pena.......

Traducción: vamos a coger al gato, llevarlo al veterinario y si se lo endiñamos mejor que mejor, porque pobrecito, qué pena, no lo podemos cuidar...... Y así fue.

Clever pesaba entonces unos 3 kg, (ahora son 5), pero vamos, no era ningún gatito pequeñito desamparado y triste... la suerte que tuvo el "gatito lindo", fue que estaba aquí su futura dueña.

Jamás entenderé el poder de convicción de esta chica, con respecto a sus padres: "mami, tengo aquí un gatito abandonado, es taaaaan mono, igualito que el que cuidamos en verano...." (inciso: el gatito del verano era una gatita de poco más de un mes y pesaría unos 300 gramos.... de ahí a que el tal Clever era igualllll!!!!).

Pero coló. Y Clever se quedó con Gádor. A su debido tiempo nuestra querida Inma le hizo la operación necesaria para todo gato macho casero que se precie y lo castró.

El caso es que Gádor venía todos los días llena de arañazos y mordiscos gatunos, es normal cuando tienes un gato pequeñito..... pero Clever, es muy joven, pero no pequeñito....

Hasta que ví el panorama: el pobre Clever no sabe como hacer entender a su dueña que es un gato, un gato, UN GATO. No es un peluche, ni un bebé , ni puedes achucharle como una loca poseída y luego enfadarte porque te araña.

Los gatos son muy dignos pero este pobre encima tiene más paciencia que el santo Job!!!. Yo soy él y no la araño, ni la muerdo, vamos le pongo un petardo en el culo a mi dueña y que vuele lejos, lejos, lejos. Pobre bicho!!!

En fin, que excepto los mimos excesivos de su dueña, es un gatito encantador y con mucha suerte, pues su familia humana le quiere mucho y le soporta bien sus "gatadas" y es feliz. Imagino que para él como señor gato que es , merece la pena convivir con la "loca de su dueña pequeña" a cambio del resto de las ventajas de vivir con una familia amante de los animales y conste que yo creo que "le vá la marcha", porque a su dueña pequeña la considera algo así como su saco de boxeo. Pero la quiere mucho, no siempre, pero lo necesario.

Ánimo Clever, mucha paciencia y sé bueno.